Uno de los grandes desafíos de aprender un nuevo idioma es empezar a hablar o a escribir. En general, leer o escuchar algo en español suele ser más fácil que hablar o escribir. Es la diferencia entre comprender un mensaje y producir un mensaje. Claro que para poder hablar primero necesitamos poder escuchar y entender lo que la otra persona nos dice. Pero, una vez que tenemos un buen nivel de comprensión, ¿qué es mejor, hablar o escribir?
Cada una de estas actividades tiene sus ventajas. Escribir en español resulta útil para pensar eso que queremos comunicar. Nos da más tiempo para revisar y crear un mensaje. Podemos organizar cada oración, chequear la ortografía. Hablar, en cambio, nos permite practicar la espontaneidad. Resulta útil para armar oraciones y frases en poco tiempo. Es la situación en la que nos vamos a encontrar en una conversación con otra persona.
En general, pienso que la escritura es una buena manera de comenzar a practicar la producción en una lengua extranjera. Porque nos da más tiempo de crear nuestras oraciones. También suele ser más fácil de corregir, cuando contamos con un profesor. Hablar en español, por otra parte, es una actividad más desafiante. Por eso, me parece recomendable comenzar con la escritura y después de un tiempo agregar la práctica de conversación.
Hablar y escribir en español son habilidades útiles y que vale la pena practicar. Según la preferencia personal de cada estudiante, habrá quienes preferirán profundizar en una u otra modalidad. No creo que aprender a hablar en español sea mejor que aprender a escribir en español, o viceversa. Se trata simplemente de descubrir una combinación que funcione para nosotros en distintos momentos de nuestro aprendizaje 🙂.
